- Te veo triste, Miranda.
- Lo siento, Addison, no quiero decírtelo. No quiero confesártelo, no quiero hablar. Porque si lo hago, si te cuento que Tacker se marchó, si te cuento que no dormía sola desde hace doce años, si te cuento que mi corazón está tan roto que a veces me gustaría sacármelo del pecho con mis propias manos.. Me vendré abajo, y no tengo tiempo para eso. No es que no me alegre verte, me aelgra mucho, pero preferiría que te fueras a casa y así la ocasión de hablar y de venirme abajo desaparecería..
- Lo siento, Addison, no quiero decírtelo. No quiero confesártelo, no quiero hablar. Porque si lo hago, si te cuento que Tacker se marchó, si te cuento que no dormía sola desde hace doce años, si te cuento que mi corazón está tan roto que a veces me gustaría sacármelo del pecho con mis propias manos.. Me vendré abajo, y no tengo tiempo para eso. No es que no me alegre verte, me aelgra mucho, pero preferiría que te fueras a casa y así la ocasión de hablar y de venirme abajo desaparecería..
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