Lo esencial es invisible a los ojos.

domingo, 16 de mayo de 2010

-Buen trabajo
-¿Buen trabajo? ¿En serio?
-¿Perdona?
-"¡Corre a mi coche!" Pones a O'Malley con las hemorragias y yo voy a tu coche.
-Tú conoces mi coche, O'Mailley no. Pero la carrera que te diste salvó una vida...
-Todo el día estuviste enseñándole a él e ignorándome.
-Quiere ser cirujano de trauma, tú elegiste cardio. Hoy no he hecho nada malo, te he tratado como a los demás.
-[...] ¡Pero yo no soy los demás! "¿Cuídate mucho?" ¿Qué es eso? ¿Ahora eres todo felicidad? ¿Quién eres, eh?
-[...] Mira.
-"Qué tal estás" "Cuídate mucho" "Buen trabajo"... ¿Qué es esto?
-Es de mi psiquiatra. Son unas frases que pensamos juntos. Son frases muy sencillas para poder decirte algo en lugar de la frase que me está matando. La que sabes que siento pero que no puedo decir porque sería cruel decirla, porque no te convengo. No quiero torturarte ni quiero mirarte con deseo cuando sé que no puedo estar contigo... así que sonrío y te digo "Cuídate mucho". Estoy liberándote. Me esfuerzo todo lo que puedo por liberarte. Intento enmendar lo que hice, ¿no te das cuenta? Solo quiero reparar mi error...

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